"En el pasado, los rituales de celebración de lo femenino y lo masculino aseguraban la abundancia de los cultivos, la fertilidad de la tierra y de la humanidad. En este ritual, cada hombre y mujer celebraban los misterios sagrados de su género, terminando en un gran encuentro: el matrimonio alquímico, en que dos personas eran unidas para potenciar lo mejor de cada uno"
Por ello, cada luna llena celebra, danza, une, espera, siente, bañate, colmate del cíclo y observa la luna...
La noche de luna llena tiene un impacto muy alquímico en la consciencia humana.
La próxima vez que se aproxime una noche de luna llena, al menos cinco días antes siéntate en la noche simplemente a esperar. Espera una hora cada noche durante cinco días. Entonces llegará la luna llena y esa noche espera por lo menos dos o tres horas. No tienes que hacer nada; sólo está ahí, disponible. Si sucede, estás listo; si no sucede, no hay nada de qué preocuparse. Si no sucede no te sientas frustrado porque no tiene nada que ver con lo que tú hagas. Si sucede no sientas que has hecho algo muy grande; si no, nunca sucederá otra vez. Si sucede, siéntete agradecido; si no sucede, simplemente sigue esperando.
Cada noche de luna llena empieza a esperar. No desees, pues eso es una perturbación y envenena todo. Es una puerta al más allá. Sólo empieza a esperarla, pero con una paciencia tremenda, sin prisa. No trates de provocarla.
Está más allá del control humano pero uno puede ingeniárselas para invitarla de una manera muy indirecta. Toma un baño, canta una canción, siéntate en silencio en la noche. Espera. Mécete con la luna, mírala y siéntete lleno con ella. Siente que la luna te baña, baila un poco; siéntate otra vez y espera. Deja que la noche de luna llena se convierta en tu noche particular para meditar; te ayudará.
Fuente: Tónico para el Alma. Osho
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